Hermosa mariposa negra
Joven y virginal, misteriosa e inocente,
cuerpo torneado en canela perfumada de vainilla,
delineado por mi pasión que te envuelve en sombras.
Niña pura, eres ofrenda al altar de mi deseo insaciable.
Cautiva en mis redes
Inocente y pura, corrompida por mi anhelo,
de tenerte prisionera, dueña de mi fuego,
tu deseo encarnado, son tus sueño más húmedo y prohibido.
Cadenas de seda te atan a mi voluntad eterna.
Cuerdas de éxtasis
Deseo acariciarte con mis cuerdas vivas,
exponerte en cadenas, desnudar tus sentidos privados,
explorar tu cuerpo virgen bajo la luna sangrante.
Cada roce es un conjuro que despierta tu hechizo de bruja.
Penetración del alma
Penetro tu alma con la mía, en un ritual oscuro,
te brindo en sacrificio al ego de mi pasión devoradora,
donde el placer se funde en dolor místico y divino.
Tu esencia se rinde, gota a gota, en mi altar de deseo.
Labios de cereza prohibida
Tus labios color cereza, junto a los míos se funden,
nuestras lenguas son serpientes que beben del cáliz vedado,
néctar de tu ser que envenena y redime al unísono.
Beso que invoca a dioses antiguos de la lujuria.
Rizos en mis garras
Tus rizos negros y misteriosos se funden en mis manos,
acariciando tu alma, tu cuerpo, tu pasión encadenada,
hilos de obsidiana que tejen la red de mi dominio.
Cada tirón es un hechizo que te arrastra al abismo.
Ojos de luna perversa
Ojos risueños y tristes, perlas de la luna mística,
eterna y velada, ventanas a tus deseos oscuros,
donde la inocencia se quiebra en éxtasis prohibido.
Espejos que reflejan, al monstruo liberado de mi ser.
Alma que ilumina tinieblas
Alma eternamente alegre e inocente que alumbras,
mi ser oscuro, liberándolo para ser tu dueño absoluto,
faro en la tormenta de placeres y cadenas góticas.
Tu luz se apaga en mi sombra, renaciendo más perversa.
Monstruo desatado
Monstruo que liberaste en mí con tu virginal llamada,
con el pasar de los tiempos, acecho en tus sueños húmedos,
persiguiéndote en laberintos de pasión y tormento.
Eterno depredador de tu carne y tu espíritu.
Eternidad en persecución
Por toda la eternidad te cazo en visiones perversas,
mariposa negra atrapada en mi red de obsidiana,
dueño de tu alma, tu cuerpo, tu deseo infinito.
Sacrificio místico que nos une en las noches sin fin.
