Posición

Para adaptar la posición cucharita en sesiones BDSM con ataduras, se pueden seguir algunas recomendaciones para mantener la comodidad, seguridad y potenciar la dinámica de control y sumisión:

Ataduras en muñecas y tobillos: En la posición de cucharita, la persona que recibe la penetración puede tener las muñecas y tobillos atados con esposas, cuerdas o correas para restringir el movimiento sin dificultar la comodidad ni causar dolor innecesario.

1.- Uso de almohadas o cojines: Colocar cojines debajo de las rodillas o entre las piernas puede ayudar a elevar ligeramente y mejorar el ángulo de penetración, además de brindar soporte y comodidad durante la inmovilización.

2.- Flexión de piernas: La persona penetrada puede levantar ligeramente la pierna superior para facilitar la penetración, mientras la pareja dominante controla la intensidad y ritmo.

3.- Sujeción de piernas: La pareja dominante puede sujetar o controlar la pierna de la persona sumisa para mantener el control y estabilidad durante la sesión.

4.- Garantizar respiración y circulación: Es importante que las ataduras no sean demasiado apretadas para evitar incomodidad, problemas circulatorios o dificultad para respirar, y mantener comunicación constante.

5.- Incorporar vendas o antifaz: Para aumentar la sensación de sumisión y vulnerabilidad, se puede agregar un antifaz o venda en los ojos, mejorando la experiencia sensorial.

En general, la posición cucharita adaptada con ataduras combina intimidad y control, permitiendo una penetración cómoda y segura mientras se mantiene el juego de poder característico del BDSM.