La sombra de mi mano te acompaña siempre,
por cualquier camino,
por cualquier pasaje del atardecer,
por cualquier situación que compartamos.
Hemos hecho un pacto entre los dos,
hoy te he extrañado,
quiero recordártelo.
Recordarte y refrendarte que estamos juntos,
que te guiaré y llevaré por caminos que no has andado,
ni esperaste andar,
que te encontrarás contigo tanto como te has encontrado
conmigo.
Gracias porque cada día me sorprendes con tu entrega y con
tu devoción.
en este camino,
he de dejarte lista para emprender el vuelo y llegado el
momento,
verte volar orgullosa.
Aún tomada de una cadena invisible,
que siempre penderá de mi corazón al tuyo,
seremos esclavos de un amor impredecible,
tu amor incondicional como ninguno.
Por qué ay un pacto...
un pacto de amor,
que ni tu ni yo...
romperemos,
pues nuestro corazón,
vivirá por siempre en nuestro amor.
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